Mostrando entradas con la etiqueta Comedia. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Comedia. Mostrar todas las entradas

lunes, 22 de febrero de 2016

Deadpool, el p*** amo





Deadpool comienza con una cámara superlenta que nos hace viajar por el interior de un coche que está a punto de completar un trompo en el aire, con sus pasajeros a mitad de camino de su aplastamiento y con todo su contenido flotando en el aire, incluida una tarjeta de Green Lantern. Y esos son los créditos (quizás sólo superados por los de Watchmen, en lo que a cine de cómics se refiere) y el comienzo de un peliculón. O lo serían si en lugar del nombre de directores, productores y actores no salieran frases del tipo "producida por los putos amos" o "dirigida por un gilipollas".

En efecto, sólo necesitamos los cuarenta segundos de créditos de inicio para saber que estamos ante una película diferente, que multiplica por mil el tono irreverente y macarra de Antman o Guardianes de la galaxia y que se salta cualquier norma no escrita sobre la seriedad en los momentos más dramáticos de una película. ¿Seriedad? Deadpool no ha incluido esa palabra en su vocabulario.

Tim Miller ha logrado una maravilla de película, en la que los superhéroes no asoman ni el bigote. Porque lo último que querría nuestro antihéroe protagonista es que lo tilden de "héroe". Lo de llamarle "súper" sí que nos lo concede, y nos lo hace saber en una de sus múltiples patadas a la cuarta pared (clase de teoría express: romper la cuarta pared es interactuar con el espectador). Desde el chicle pegado a la pantalla hasta sus monólogos plagados de insultos en los que mira directamente a cámara. Ingenioso al tiempo que vulgar (y el término que se corresponda con un chulo de cojones), así es Deadpool.



Lo bueno de esta película es que puede satisfacer el gusto de cualquiera que no sea una monja o un padre que (en qué estúpido momento) ha llevado a su hijo pequeño a ver esta película. Los paladares más exquisitos disfrutarán con un portento cinematográfico, con unas escenas de lucha perfectamente editadas, con un guión ingeniosamente elaborado a base de flashbacks enquistados de manera muy adecuada dentro de la película. Los amantes de Masacre en su versión cómic verán cómo su personaje favorito no ha sido desvirtuado por la gran pantalla, sino que ha conservado su lenguaraz discurso, sus salidas de escena y sus referencias a Lobezno.

Y el resto del universo podrá ir a ver al cine una película de acción realmente entretenida y divertida, que al mismo tiempo resulta ser la obra redentora de Ryan Reynolds. Sí, amigos, Reynolds ha hecho un buen trabajo (aplausos). Su Deadpool nos hará reír a lo largo de todo el largometraje, cosa sorprendente si pensamos en lo difícil que es seguir manteniendo las carcajadas del público durante casi dos horas, sin bajar nunca el nivel de los chistes. ¿O debería decir 'comentarios salidos de tono'? Comedia no sólo verbal sino también física (una mano separada de su cuerpo haciendo una peineta, prodigioso).

Detalles como poner a Ray Charles de fondo cuando aparece una vieja negra y ciega, mencionar a Lobezno como alguien que rima con "follezno" o usar una máscara de Hugh Jackman, elegir a Wham para la banda sonora, comparar a Cabeza nuclear negasónica adolescente con Sinéad O'Connor y un larguísimo etcétera son los detalles que hacen de Deadpool una película merecedora de mi tiempo y mi dinero.

Animo a verla a cualquiera con ganas de pasar un rato divertidísimo, a quien quiera deshacerse de sus prejuicios hacia Ryan Reynolds o los superhéroes de Marvel, o simplemente quien sea fan de los cómics. Una película completamente descarada, maleducada, sarcástica y carcajeante, en la que no se respeta ni a la novia, ni al amigo, ni a la roomie ni al archienemigo del protagonista. No me extraña que Deadpool 2 ya esté en camino.



  • Ficha en FA.
  • Ficha en IMdB.
  • NOTA: 8'75



miércoles, 25 de febrero de 2015

El bosque en el que se perdió Disney

Into the woods es una película musical producida por Disney, basada en el libreto de James Lapine y Stephen Sondheim (que a su vez se encargaron del guión y de la música del filme, respectivamente). Reuniendo grandes cuentos de los hermanos Grimm en una sola historia - Cenicienta, Caperucita Roja, Jack y las habichuelas mágicas, Rapunzel -, esta película nos adentrará en un mágico bosque donde todos los personajes nos mostrarán una peculiar perspectiva de los clásicos para niños.


Nos encontramos ante un matrimonio de panaderos que descubren que sobre la familia del marido hay una maldición, la cual les impedirá tener hijos a menos que consigan los cuatro objetos que la bruja del bosque les ha pedido. En este frondoso escenario se cruzarán con los ilustres protagonistas de los cuentos de los hermanos Grimm... o una versión un poco distorsionada de ellos.

Disney ha apostado (¿quizás?) por una idea innovadora, pero quisiera averiguar cuál fue la mente privilegiada que decidió darle forma a esta película. El toque cómico y la estética característica de la película son de agradecer, pero podrían haber destacado aún más si hubiesen estado acompañadas de un mejor montaje y un mejor repertorio de canciones (y, en mi opinión, de un clima más crudo y oscuro). Además, pese a que nunca he sentido un obvio rechazo por los musicales, es difícil que éstos me entusiasmen demasiado. Sweeney Todd y Les Misérables son los únicos (de la última década) que no se han estrellado en la gran pantalla, desde mi punto de vista.

Lo cierto es que los musicales son un riesgo, porque no gustan a todo el público y porque necesitan que la historia atrape mucho más que cualquier película normal. Compiten con una desventaja, que es la de la música; alguna cancioncilla está bien, pero soportar más de una hora de gorgoritos requiere una gran recompensa a cambio de esa tortura. En este caso, Into the woods se ha columpiado bastante y la jugada le ha salido mal. Debo admitir que los primeros minutos de película son maravillosos, pero los otros 120 minutos me han sobrado. Intentaré explicar resumidamente por qué.

Lo que me ha impedido disfrutar de Into the woods ha sido el montaje mayormente. Escenas cortadas cuando no debían, historias demasiado entremezcladas, que impedían el avance de la historia y desconcertaban al espectador, poca fluidez y demasiados personajes que no han sabido ganarse un hueco. Cuando ves una película y te tienes que esforzar por seguir el ritmo, el cansancio te arruinará la fiesta. Es lo que me ha sucedido con este musical, porque creo que su principal enemigo es la forma en que han decidido narrarlo. Un exceso de caos. Anticlimático.



Por otro lado está ese casting tan incongruente. Una simpática Emily Blunt y una impecable Meryl Streep (como siempre; si bien no merecedora de la nominación al Oscar) son lo único salvable del grupo, y eso que son una infinidad de personajes. Johnny Depp ha necesitado sólo dos minutos en pantalla para comerse al resto del elenco (literal y metafóricamente). Anna Kendrik quizás pueda redimirse gracias a su voz, pero a duras penas. A su favor diré que los personajes tampoco ofrecieron a los actores una oportunidad para brillar, porque Disney ha desfigurado la parte oscura (y más interesante) de este libreto musical, para convertirlo en una película supuestamente familiar, pero a la que yo evitaría mostrar a los más pequeños. No me quedó nada claro si pretendían crear una película más similar a la obra original o más adecuada al público infantil típico de la compañía del difunto Walt.

Para colmo, la segunda hora es innecesaria. Podrían haber cerrado la historia a la mitad, pero decidieron continuarla y rizar demasiado el rizo, para seguir hundiéndose en el barro. De un "está bien" pasó a un "qué hago con mi vida". Es precisamente esta dilatación sobrante la que la echó directamente fuera del saco de películas entretenidas que no te hacen sentir que has malgastado tu dinero.

En conclusión, un grupo de personajes demasiado amplio para un reparto tan mediocre, sólo una canción (de mil) que te alegre el día, una insufrible última hora y un incongruente ritmo. Into the woods es un despropósito, una mala manera de malgastar una gran idea y unos preciosos escenario y vestuario, una oportunidad desperdiciada para mostrar el lado oscuro que Sondheim y Lapine plasmaron en el libreto, tan atractivo. Meryl Streep en este caso es la fruta prohibida que nos ha atraído engañosamente hacia una bala perdida de Disney. Y la última frase de Cenicienta: "A veces hasta me gusta limpiar".


  • Ficha en FA.
  • Ficha en IMDB.
  • NOTA: 5'5

lunes, 16 de febrero de 2015

La inesperada virtud de la ignorancia



Birdman, una película que ha pegado fuerte a principios de año en nuestro país y en los festivales internacionales de cine. Un filme sobre la necesidad de Riggan, un actor que saltó a la fama por su interpretación de un superhéroe en la gran pantalla, de que su nueva obra de teatro sea perfecta en su estreno en Broadway para poder recuperar su anterior prestigio. 

Antes que nada, quisiera desahogar mi frustración por ver que, después de mes y medio encerrada por los exámenes, ilusionada por mi efímera libertad estudiantil (de nada más y nada menos que tres días completos), conseguir ver Birdman en el cine me iba a resultar casi imposible. Quizás sería porque se estrenó hace un mes, o tal vez porque en Kinépolis tenían DIEZ salas completas reservadas para 50 sombras de Grey. Bam. Así como lo digo. No cinco, no nueve. Diez. Para esa mojoná. En fin. La cultura en este país es un lujo por el IVA y por la escasez de cerebro de la población general. Como diría Vaquerizo... Ala, a tomar por culo.



Dicho esto, no me importaría volver al cine (si me lo permite 50SDG) para ver Birdman de nuevo. Se merece todos y cada uno de los galardones con los que se le premie, y no me extrañaría que la película fuese ganando valor con el paso de los años. En resumidas cuentas, me ha encantado y animo a quien tenga ganas de verla que no espere a que la retiren de la cartelera.

Sin embargo, Birdman hay que entenderla con cautela. A mí personalmente me ha parecido fantástica, pero la historia - el argumento - no es para todos los públicos. Es una historia muy especial que, aunque creo que es difícil que no guste, sí es cierto que a la gente puede que no le entusiasme tanto como a mí. Suele ocurrir con los grandes trabajos, que a cuanta más gente llega, más fácil resulta encontrarle detractores.

Pese a lo que el trailer pueda hacer creer a algunos (y es que este trailer da una impresión bastante desacertada sobre la película), la mayor parte de la película transcurre en uno de los teatros neoyorkinos de Broadway y se centra en la inseguridad del protagonista sobre su capacidad para crear una obra brillante que satisfaga a la crítico más importante de ese mundillo, Tabitha Dickinson. Esto (el 'hacinamiento'), junto al peculiar rodaje de la película, constituyen los principales obstáculos para el público. Si no te convencen, Birdman será para ti una más del montón.

Y aquí empieza lo mejor de la película

Este peculiar rodaje al que me refiero es el famoso 'falso plano-secuencia' del que tanto se ha oído hablar. Hasta que no empezó la película no lo comprendí, y quizás el entender lo complicado y maravilloso que resulta crear un largometraje al completo de esa manera, lo convierte (a mis ojos) en uno de los más mágicos de este año. Para el que no sepa qué es un plano secuencia, aquí hay varios ejemplos: Children of men, Goodfellas, Kill Bill. Como se puede observar en los tres vídeos, no hay ningún corte, es una toma continua sin detenciones y que por norma dura bastante más de lo habitual. Dice Wikipedia que la más ilustre es la de Touch of evil, pero no he tenido el gusto de ver esa película. Gravity (de nuevo Cuarón) también apostó fuerte con otro plano secuencia de 17 minutos para comenzar su película.

Para los que ya estén familiarizados con esto, que sepan que Birdman es en sí un plano-secuencia al completo. ¿Quiere esto decir que rodaron hora y media del tirón? No, y a eso es a lo que se refiere la gente con lo de 'falso'. A lo largo de la película se echa mano de diferentes recursos para crear la ilusión de que la cámara no ha detenido su grabación, aunque lo cierto es que se trata de una sucesión de planos-secuencia muy bien trabajados, que ayudan a contar el filme desde la perspectiva de Riggan, el protagonista.

No soy experta en cinematografía ni pretendo serlo, pero puedo suponer que se trata de una nueva forma de rodaje que te ayuda a ser testigo presencial de toda la historia. Te ayuda a comprender lo caótica y desestructurada que es la vida de Riggan, cómo la gente va entrando y saliendo en su vida - como personajes en un escenario, que aparecen para luego hacer su mutis. Muchos acusan a Iñárritu de ser demasiado ambicioso, de haber pecado de pretencioso. El público, por su parte, cuenta con un notable sector al que no le terminan de convencer los 118 minutos de paseo (un mareo, en palabras de uno de mis amigos). Yo, como ya he dicho antes, estoy enamorada.

Poco tengo que decir acerca del reparto y de cómo Norton brilla en escena, algo habitual en él. Curioso que Michael Keaton haga el papel de su vida interpretando al ex-Birdman, por decirlo de alguna manera, un superhéroe de película igual que el Batman con el que una vez trabajó bajo la dirección de Tim Burton; dudo que alguna vez se supere a sí mismo después de esto. El hecho de que Birdman haya sido grabada de aquella manera permite que cada uno de los personajes tenga lo que yo llamo su 'momento de gloria'. En la película todos tienen un problema con el cual lidiar, y se expresan a modo de monólogo, con la cámara enfrentándolos y permitiéndoles desahogar sus frustraciones. Ingenioso y eficaz, a mi ver.


Porque Birdman nos presenta a un grupo extravagante y caprichoso, como sólo lo pueden ser los actores, encumbrados por Riggan (M. Keaton) y su obsesión con ser alguien, brillar como antaño lo hizo con su superhéroe y que la hija a la que no logra comprender lo pueda ver con buenos ojos. Es el drama de un hombre - y el de su hija, su ex-mujer, su novia, su amigo, sus compañero de reparto... Con un toque de humor muy sencillo y divertido (el momento de la batería es fabuloso).

Personalmente, creo que con este largometraje no es para todo el mundo. Ya lo he dicho en párrafos anteriores, la historia es tan especial que puede defraudar a muchos, sobre todo si van a verla con grandes expectativas. Sin embargo, en el aspecto técnico, es irreprochable (mención especial para el sonido y esos golpes de percusión). Para quien quiera una película de acción, que entre en otra sala; quien disfrute con el cine en general, puede probar con ella porque debería ser imprescindible; a la que le importe un pimiento todo, el desnudo de Norton puede que haga a esta película merecedora de su tiempo.

Repito lo mismo, estoy encantada con la película y quizás la esté sobrevalorando, pero en el cine todo es subjetivo y yo no soy quién para llevarle la contraria a los críticos. Quiero ver qué me depara este 2015, porque ha empezado muy fuerte.


  • Ficha en FA.
  • Ficha en IMDB.
  • NOTA: 10



domingo, 25 de enero de 2015

La gran estafa (americana)

La Gran Estafa Americana (la GEA a partir de ahora - irónicamente, las siglas de gastroenteritis aguda...) o American Hustle nunca pudiera haber tenido un título más acertado. Es una estafa. Mi situación A.G. (antes de La GEA) estaba dividida entre dos tipos de opiniones. Los que creían que era una gran película, versión que se reafirma con tanto galardón cinematográfico, y los que pensaban que era decepcionante. Así que me enfrenté a la película intentando ser lo más neutral posible, aunque debo admitir que mi cerebro estaba ya acomodado en el sillón del 'pssss'.

Hasta el cartel me recuerda a otra...

La GEA es una acumulación de errores. No quiero que nadie me malinterprete, es una película a manos de un director aceptable y unos actores aceptables. Es de esperar que de esa ecuación salga un resultado 'aceptable', ni más ni menos. El problema llega cuando intentas vestir a la mona de seda y tú logras discernir a través del disfraz. Que en lugar de terminar de verla con un 'no está mal', lo haces con un 'pero esto qué es'.

Una historia sobre estafadores, policía, mafia, políticos, mujeres florero, celos... cualquiera diría que estamos ante el remake de Goodfellas, con giros de guión e intentos de montaje al estilo de Snatch. Pero en realidad es la versión pija choni de cualquier dramón que quiera involucrar a federales y mentirosos, porque hay mucha pasta de por medio pero la mona queda muy mal vestida. La GEA es una película vacía, sin sentido y para nada divertida. Si no recuerdo mal, fue estrenada al mismo tiempo que El lobo de Wall Street. Mi más sentido pésame a los que se dejaron el dinero en una entrada para La GEA y no pudieron disfrutar de la otra: eso sí que es comedia negra.

Vestuario impresionante, pero no logré situarme en la época...

Ahora, seriamente, me gustaría argumentar por qué no me ha gustado esta película. Primero, y el motivo esencial por el cual estoy siendo tan parcial, por su pretensión. La GEA ha querido ser inmensa, única, auténtica, divertida, chispeante, ingeniosa. Hace falta algo más que todo ese reparto, esa B.S. y a Jennifer Lawrence fregando mientras canta para lograr esa meta. Hace falta ser el puto SCORSESE, coño. Pero si algún día tengo ánimo y tiempo, ya me dedicaré a intentar descifrar el extraño amor que siente la Academia por O. Russell, porque yo todavía no disfruto con ninguna de sus películas (The Fighter, si eso).

¿Por qué ESO para ESTO, querido Bale?

Por otro lado tenemos al reparto de lujo. Sin ganas de diseccionar lentamente a cada uno de ellos, diré que Bale casi me convence, Amy Adams bastante notable, Bradley Cooper necesita a alguien que le exprima su potencial ya que aún no lo ha encontrado, Jennifer Lawrence me agota y no puedo creerme su papel de esposa maníaco-depresiva, Jeremy Renner parecía haber aterrizado directamente desde otra película y DeNiro necesitaba más minutos porque gracias a él he regresado a la vida para poder tragarme otra hora más de bodrio. En resumen: cómo tirar a la basura millones de dólares. O no, porque por lo visto a la crítica profesional le ha gustado mucho.

Es guapa y no se puede discutir

No quiero ni pensar en lo mal que lo pasarían los guionistas y el director para saber cómo intentar hacer creer al espectador que estaban ante una película de intriga. He de reconocer que he disfrutado de la pareja de Bale y Adams cuando se han puesto sus trajes de estafadores, pero ese brillo se ha difuminado en las otras dos horas de largometraje. Un mal inicio y una incapacidad para mantener la tensión justa, o simplemente un mal guión. La única intriga que existe en la película es saber cuándo va a terminar y qué narices pasa con el hermano que fue a pescar en el hielo. La verdad es que el cuento no ha funcionado para mí, porque desde el minuto dos ya he sabido quién se queda con qué y quién termina dónde.

Además, algo que me ha irritado sobremanera, los personajes son más planos que mi tabla de planchar. Cuando quieres dar forma a una grandísima película, necesitas personajes que convenzan al público. Utilizando los paralelismos evidentes de Scorsese, tomaré como ejemplo a Ray Liotta o Leonardo DiCaprio, quienes aun siendo el clásico antihéroe se te meten bajo la piel y te conquistan. A mí me han repelido todos los personajes, sin excepción. Cuando quieres ganarte al público, debes saber cómo engancharlos con unos protagonistas profundos y chispeantes, con una historia de verdad y una meta que deseen lograr a toda costa. He terminado la película sin haber captado las ambiciones de los personajes, qué los mueve hacia una determinada dirección. Eran como unas marionetas muy bien vestidas moviéndose por un lindo escenario.

Dos horas y pico de mi vida... por dios. Probablemente no hubiera podido ser más subjetiva de haberlo intentado, pero La gran estafa americana me ha decepcionado tantísimo que he dado rienda suelta a mis manos sobre el teclado. Puede que con la luz del día encuentre algo que valorar positivamente en esta película, pero ahora mismo sólo encuentro motas de polvo. Casposa a más no poder. Sólo la recomendaría a alguien que no tuviera demasiadas esperanzas puestas en ella y que disfrute con las grandes estrellas del reparto.

Puede que el universo colapse esta noche, porque creo que es la primera vez que coincido con una crítica de Boyero.



  • Ficha en FA.
  • Ficha en IMDB.
  • NOTA: 6'5

lunes, 5 de enero de 2015

Risas para los exámenes

Tengo abandonado el blog por culpa de los exámenes de enero, apenas tengo tiempo para siquiera pensar en ver alguna película o serie (el final de SoA fue mi último capricho) y menos aún para ponerme a escribir una entrada. Me he convertido en una ermitaña que deambula por mi casa, así que mi madre decidió solucionarlo sentándose conmigo a ver una comedia. Resultado: hoy tengo menos ganas de destripar a mis profesores de la facultad. Por tanto, voy a intentar ayudar a todos aquellos que estén en las mismas condiciones que yo, con mantita y apuntes, para que antes de irse a la cama se echen unas risas.

¡APUNTA UN CERO!

No puedo empezar a hablar de comedia sin mencionar a los Monty Python, porque indiscutiblemente son los reyes en este género. Probablemente todo el mundo haya visto alguna de sus películas, pero si aún no lo ha hecho, les invito a hacerlo: Los caballeros de la mesa cuadrada, El sentido de la vida o La vida de Brian son las más conocidas, su 'Trinidad', pero también cuentan con multitud de sketches (curiosidad: nuestra tan conocida palabra spam nació de uno de ellos). Si tuviera que elegir alguna, quizás diría que La vida de Brian es mi preferida, aunque la que nunca falla al recomendarla es Los caballeros de la mesa cuadrada. Su seña de identidad es el humor absurdo y flemático.

De las mejores escenas del cine: Always look on the bright side of life

Y es que los británicos son especialistas en hacernos reír con las ideas más simples y estúpidas (que se lo digan a Mr. Bean), pero también en las tragicomedias. Ejemplo de ello son sus dramáticas Full Monty, Trainspotting o ¿Teléfono rojo? Volamos hacia Moscú. Y no se quedan ahí; nuestros vecinos europeos también nos han regalado grandes momentos con Un funeral de muerte (la británica, la americana probablemente dé pena), Snatch. Cerdos y diamantes, Un pez llamado Wanda, In the loop, Arma fatal, Un hombre lobo americano en Londres o El quinteto de la muerte.



Sin duda no olvidaré la que vi anoche con mi madre, Le prénom (El nombre en español), que pese a su final me hizo reír bastante. Muy parecida a ella es Un dios salvaje de Polanski, o también La cena de los idiotas (1998); las tres no tienen un humor demasiado evidente, sino que se trata de comedias más serias y puede que no todos las disfruten. Pero los que se hayan divertido con ellas, probablemente también sabrán apreciar clásicos como El guateque, La gran seducción (2003), El apartamento o Con faldas y a lo loco (y mil más de Billy Wilder), Un cadáver a los postres, La pantera rosa (1963), Mejor... imposible y un largo etcétera.

I'm not a natural blonde!

Luego tenemos un amplio campo en el cual quiero regocijarme un rato. El humor absurdo y, literalmente, de idiotas. A lo largo de los años he ido aprendiendo que no todos pueden disfrutar de la 'relajación neuronal' que precisan estas comedias. He tenido el dudoso placer de haber visto películas con lágrimas en los ojos mientras mis amigos mantenían una expresión más estoica que las paredes de un museo. Porque no todo el mundo puede comprender la gracia que me hace a mí ver a un alienígena huir aterrado por una toalla. Sí, estoy hablando de Guía del autoestopista galáctico y lo mucho que me gusta a mí y lo poco que le gusta al resto del universo. Estas reacciones de desconcierto, de "por qué cojones se ríe la tía esta" también he podido disfrutarlas viendo El jovencito Frankenstein, Spaceballs (toooodas las de Mel Brooks merecerían estar aquí. Todas), El gran Lebowski, Zoolander, Torrente, Aterriza como puedas, Little Nicky, Austin Powers, El ataque de los tomates asesinos, Top secret, Arsénico por compasión, Sopa de ganso, Loca academia de policía, Los TenenbaumsMira quién hablaZombies party y mil millones más pero que ahora no me vienen a la mente. Sí, me río con cualquier estupidez.

Se dice 'Fronkonstin'

Para los más conservadores, que no soportan las idioteces del párrafo anterior o tampoco quieren comedias más serias, aquí van las que siempre han hecho reír al 99% del público (si has visto alguna y no te has reído, fuera de aquí, señorrobotsinsentimientos): Resacón en Las Vegas (sí, es divertidísima, sobre todo gracias al chino maricón, y las secuelas mantienen buen nivel), Scary Movie (la 1 y la 2 son decentes, la 3 es penosa y en la 4 remontan con lo de MitsubishiToyotaFujitsu), Dos tontos muy tontos (aún no he visto la segunda, y no me atrevo), American Pie (debo reconocer que a mí no me gustó tanto como al resto del mundo), Ali G (por dios, yo es que disfruto con cualquiera de Baron Cohen), Los padres de ella (aunque los juegos de palabras traducidos al español pierden mucho), Algo pasa con Mary (debo confesar que ésta tampoco es de mis favoritas, precisamente),  Ace Ventura o Yo, yo mismo e Irene (sé que Jim Carrey no es del gusto de todos, y lo entiendo perfectamente. A veces es irritante) o la reciente Ocho apellidos vascos. Todas bastante conocidas y que probablemente ya hayan sido vistas por cualquier persona con un acceso a un ordenador (sí, por el cine no es que esté muy accesible últimamente en este país...).

Fuck. Fuck. Fuck.

Cierro esta entrada haciendo honor a mi patria. En España somos unos tocapelotas puntillosos, y no sabemos apreciar muy bien el humor - que si en realidad no hace gracia, que si es una tontería, que si es una película antigua y su humor no es inteligente, blablabla. Aunque sé que no comparto gustos con la mayoría, quería añadir varios títulos de nuestra cosecha, porque tenemos verdaderas joyas de la comedia (aviso a navegantes: me gusta Torrente, así que ya os podéis imaginar lo que viene después): El milagro de P. Tinto, La comunidad, Crimen Ferpecto o El día de la bestia (Álex de la Iglesia y su humor, delicioso), La vaquilla, Amanece que no es poco, La cabina (clasicazo), La escopeta nacional, ¡Bienvenido, Míster Marshall!, El verdugo, Carmina y amén, Mujeres al borde de un ataque de nervios, La gran familia española, Airbag o El robobo de la jojoya.



Y hasta aquí mis aportes. ¡Ánimo con los exámenes!


lunes, 8 de diciembre de 2014

Oda a la fotografía

Llevo un fin de semana de lo más agobiante, así que todas las noches me pongo alguna película para desconectar. Esta vez han tocado tres títulos bastante conocidos (uno de ellos afortunadamente lo vi en el cine), que debería haber visto a estas alturas pero que nunca he encontrado el momento - ni el humor. En lugar de crear una entrada para todas ellas, como tampoco tengo demasiado tiempo he decidido unirlas en una sola publicación. Porque todas tienen en común dos cosas: la fotografía (o el montaje, según quién) es impresionante y sus directores también.


EL LOBO DE WALL STREET



Divertida, irreverente, es una gran comedia en un estilo muy agresivo. Me echaba hacia atrás su duración, así que nunca encontraba el momento oportuno para 'malgastar' tres horas de mi vida viendo a Leonardo DiCaprio. El hombre se sale, y cada uno de los monólogos de su personaje es dinamita. No recomendada para mentes puras y sensibles, pues la droga y el sexo están en cada segundo de metraje (la escena de las pastillas Yellow me dejó medio muerta de la risa). Eso sí, es increíble que una película así consiga hacernos caer en la trampa del propio personaje de Jordan Belfort, que nos engatusa y nos hace creer que ser ricos a costa de los demás está bien; aplaudo a su intérprete y su director, porque logran mentir al propio espectador.

Lo mejor: DiCaprio, DiCaprio, DiCaprio, los monólogos de DiCaprio y el montaje con esa estupenda banda sonora.

Lo peor: la duración y (para los más castos) los excesos de los personajes.




EL GRAN HOTEL BUDAPEST



En su estilo habitual, Wes Anderson nos presenta una historia realmente divertida sin olvidar el drama, que pasa muy desapercibido gracias al toque entrañable que el director consigue en todas sus películas. De las tres que hoy estoy mostrando, ésta es la que tiene una fotografía más impresionante. Y la historia más extravagante, o quizás no sea el argumento de la película sino la curiosa manera en la que nos es presentado, con importantes cambios de ritmo y la delicadeza o dulzura de los personajes.

Desde el primer fotograma se puede reconocer la mano del autor a millas de distancia, es su estilo puro y visual impregnando cada toma, frase o vestido para conseguir relatar un cuento de hadas dirigido a adultos. Pero, en un extraño modo, la comedia termina y deja un sentimiento plomizo en tu subconsciente; Anderson es un mago del disfraz y sabe camuflar la melancolía con su florida estética. Genio.

Lo mejor: la fotografía, indudablemente. El reparto y la historia, de diez; la banda sonora, de nueve.

Lo peor: no les gustará a los más tradicionales porque el humor es demasiado 'elegante', y puede que a muchos no les convenza. Es muy al estilo del director; si no te gusta Wes Anderson difícilmente te gustará el Gran Hotel y sus personajes.




INTERSTELLAR



Christopher Nolan se ha atrevido a dar un salto de gran importancia. Su afamado afán por descubrirnos la cara más oscura del ser humano ha sido sustituido por el amor, el sacrificio y la fe en la humanidad. El resultado ha sido una mezcla extraña, en la que hay momentos en los que me creo a los personajes, pero otras veces resultan demasiado artificiales. Creo que Nolan debería limitarse a lo suyo, que se le da genial, y no intentar conquistar otros terrenos que no calzan con su estilo.

La historia es simple, con fragmentos extraídos de Armaggeadon, Elysium y Contact (y probablemente alguna más), que no sorprende por el argumento pero sí por la estética. Me gustó muchísimo la manera de mostrarnos cómo es un agujero de gusano, o cómo serían si existieran. La verdad es que no soy física, pero intuyo que Jonathan Nolan no eligió a uno muy competente para asesorarlo. Licencias de autor que en este caso concreto creo que superaron el límite permitido. Aun así, es una película entretenida y técnicamente muy correcta, aunque no asombra tanto como otras de estos hermanos.

Lo mejor: para mi gran sorpresa, Matthew McConaughey es lo mejor de la película. Los efectos especiales y la fotografía son espectaculares, [SPOILER] así como la idea del agujero negro y la superposición de planos y tiempos.

Lo peor: Matt Damon completamente innecesario, así como los últimos diez minutos de la película. Las transgresiones de la física, demasiado gratuitas (o, al menos, poco creíbles).


martes, 28 de octubre de 2014

Relatos salvajes

'Fiesta del cine' significa tener bandera verde para ver varias películas al día hasta que te lagrimeen los ojos, conseguir perder tus hermosas nalgas por estar sentada en las butacas del cine durante horas y conseguir una hipertensión de caballo por culpa de la sal de las palomitas. Como ninguna de esas cosas me ha disuadido en las anteriores ocasiones que han puesto las entradas a menos del 50% de su precio original, ésta semana no ha sido diferente. Ayer vi 'Relatos salvajes' y 'Perdida'. Como las clases de la facultad y las horas de sueño perdidas me han licuado el cerebro, haré las reseñas en días separados, y empezaré por la argentina.



Relatos salvajes es un título que no engaña: la película te cuenta relatos y son muy salvajes. No tiene más vuelta de hoja, porque el salvajismo es lo que la define. Sus títulos: 'Pasternak', 'Las ratas', 'El más fuerte', 'Bombita', 'La propuesta' y 'Hasta que la muerte nos separe'.



Quizás los más escépticos sean reacios a ver una película que tiene varias historias argumentales diferentes, y necesiten una columna vertebral a lo largo de toda la película. Pues bien, desde el principio digo que Relatos salvajes tiene un hilo conductor muy claro: la violencia.



Resalto lo de la violencia porque puede que a los más sensibles les cueste comenzar a introducirse en el filme. No es un American History X ni un Saw XXIV, ni mucho menos. Pero es una violencia que puede impactar más por el hecho de que la película es cruelmente realista. Ver cómo un psicópata tortura a sus víctimas es duro. Pero más impactante es ver cómo un hombre corriente, como tú o como yo, puede sufrir una serie de sucesos que lo lleven a la pérdida total del control, que se desquicie hasta el punto de agredir violentamente a alguien. Porque sabes que, en su situación, tú pudieras haber cometido un delito más grave que el de golpear a alguien con un martillo.



La película juega con la empatía de forma brillante, y es su principal punto a favor. El espectador se verá absorbido por las historias, unas más que otras, y comprenderá perfectamente qué ha llevado a los personajes a llegar a ese extremo. Porque cada persona tiene un umbral distinto, pero todos terminamos perdiendo la paciencia en algún momento. Y es entonces cuando sale a relucir nuestro monstruo interior, el gran hijo de puta que llevamos dentro. Aparece la violencia, la ira, la frustración, las ganas de partir las rodillas de alguien.



Son seis historias sorprendentes. Aunque a la tercera ya sabes por dónde van los tiros, el guión consigue despistarte y confundirte. El orden en el que están secuenciadas ha sido, desde mi punto de vista, una elección muy acertada. La violencia no va escalando, pero sí la complejidad y el humor de las historias, con lo que el director consigue de manera brillante mantenerte expectante porque estás continuamente pensando '¿ahora quién se cabreará?' y te vas sintiendo más en sintonía con los protagonistas, porque comprendes perfectamente por qué han rebasado el límite de su paciencia.



Relatos salvajes no decae, y eso es todo un logro debido a su estructura. Uno teme que entre dos historias fabulosas se cuele una mediocre y te saque de la película, pero como dije el orden de las mismas es perfecto. Cada cual es más entretenida que la anterior, sin significar eso que la última sea mejor (aquí debo hacer un inciso, porque mientras la favorita de mis amigos fue la última, la mía fue la de los dos hombres en la carretera, sublime), pero el humor negro y la excitación van in crescendo.



Quizás el único inconveniente es precisamente esa división en seis fragmentos separados. Después de ese brutal comienzo, estuve esperando ver a los conocidos de Pasternak en el resto de historias, como una manera de entrelazarlas todas de manera sutil. Pero no, no son trozos de un mismo pastel, sino que son dulces distintos en una misma pastelería, nada que ver unos con otros. Ah, bueno, y los pocos chistes que no entenderemos a menos que hayamos nacido/vivido/reencarnado en Argentina. Aun así, un aplauso a los guionistas y al director, por un trabajo tan sencillo, divertido, realista e impecable.


martes, 30 de septiembre de 2014

El quinto Beatle

Sinopsis
Antonio es un profesor de inglés que viaja hasta Andalucía para conocer a su ídolo John Lennon, Belén es una joven embarazada que regresa a casa sin tener claro qué va a ser de su futuro y Juanjo es un adolescente que ha escapado de casa tras una pelea con su padre. Los tres viajarán en el coche de Antonio hasta Almería, mientras deciden qué hacer con sus vidas.



Javier Cámara es de los mejores actores que disponemos en España. Puede que muchos no coincidan conmigo, pero una de las razones por las que esta película ha tenido tanto bombo y platillo ha sido gracias a este hombre de rostro afable y medio calvo. Me ha encantado verlo de nuevo, me ha encantado su papel, me ha encantado su sonrisa. Me encanta Javier Cámara.

Natalia de Molina, elegida Actriz Revelación, para mí hace un trabajo decente. Ni más ni menos, estoy contenta con lo que he visto y espero que tenga suerte en su futuro profesional. Mantiene bien el nivel pese a compartir pantalla con Cámara, aunque me haya irritado sobremanera cómo 'esconde' el acento andaluz. Vale que pueda resultar complicado lidiar con él si no eres de la tierra pero, ¿qué necesidad había de forzar tanto una pronunciación más neutra? Toda la película estremeciéndome cada vez que escuchaba una esssse y luego se le escapaba una aspirada. Por otro lado, Colomer (Pa negre) no me ha gustado. Sobraba. Quitaba a su personaje de un plumazo. ¿Qué aporta? No voy a defender mi postura, simplemente no me ha gustado.

Belén, interpretada por Natalia de Molina
Juanjo, interpretado por Francesc Colomer

No soy muy amiga de los Beatles. A riesgo de que me suceda lo mismo que a Juanjo y me echen a patadas de un coche, soy más de los Rolling. A los de Liverpool los encuentro muy... cursis (no se me ocurre definirlos de otra manera), pero he encontrado esta historia muy apropiada para acompañarla de las lecciones que Antonio, el profesor de inglés, va sacando de sus letras. Como el dice, la vida es como sus canciones: alegre y melancólica.



Debo decir, sin embargo, que aun teniendo la intención de mostrarnos una 'lección de vida', a la película se le queda grande este propósito. Es más un problema de guión que de dirección o reparto (de hecho, diría que Cámara logra engrandecer la historia). Tres personajes que en un principio nada tienen que ver los unos con los otros, terminan estableciendo un vínculo. Me he creído ese vínculo. Pero no me he creído el desenlace, no entiendo hacia dónde termina dirigiéndose la historia. Es como si todo lo que han vivido juntos de forma tan intensa y breve no haya servido para nada.

Almería sale preciosa

He disfrutado con la película y no se me ha hecho especialmente difícil de digerir. Se cataloga como comedia, aunque el drama se come al humor y durante el final de la película tenemos la sensación de que hay algo por terminar, queda algún cabo suelto. No estoy familiarizada con David Trueba, y no tengo mucho que aportar sobre él, pero supongo que el guión de una 'road movie' tiene un juego muy limitado. Repito, he disfrutado con la película, pero le falta sustancia y no sabría definir qué es de lo que carece.

Por último, repetir que Javier Cámara es increíble. Merece la pena ver Vivir es fácil sólo por contemplar su interpretación.


  • Ficha en FA.
  • Ficha en IMDB.
  • NOTA: 7

sábado, 30 de agosto de 2014

Cómic desconocido, superhéroes imprescindibles

Sinopsis
Peter Quill es un 'terrano' perteneciente a un grupo de piratas que se dedica a saquear por todo el Universo bajo el nada conocido pseudónimo de Star-Lord . En el planeta Morag le arrebata un orbe a uno de los secuaces de Ronan, un jefe kree, e intenta venderlo a espaldas de su líder Yondu. A consecuencia de sus acciones, tendrá que huir de la asesina que Ronan manda tras él y los cazarrecompensas que desean cobrar el precio que han puesto a su cabeza.



Marvel - y su rival DC - es ahora mismo una mina de oro. Desde su salto a la gran pantalla, no para de cosechar éxitos (luego tenemos Green Lantern, en fin... olvidémoslo). Ahora lo ha intentado con Guardians of the Galaxy y tuve la oportunidad de verla en el cine hace una semana. He de decir que, desde mi humilde punto de vista, Marvel y DC están abusando del tirón que están teniendo en taquilla. Tal y como lo fueran las mafias años atrás, ahora son los superhéroes la moda de la gran pantalla. ¿Hasta cuándo tendremos que 'soportar' toda esta sucesión incesante de secuelas? ¿Tendrán las narices de hacer otro remake de Batman cuando ya no les queden personajes interesantes, a riesgo de no llegarle ni a los talones a la versión de Nolan? Estamos cansados de superhéroes; menos mal que al menos se lo curran.

Ant-Man. En serio. 
Volviendo a la película que nos ocupa, Guardianes de la Galaxia - como se ha traducido en este país - está basado en un cómic de Marvel. Debutaron, si no me equivoco, en "Marvel Super Heroes" nº18, y el equipo original fue asumiendo bajas e incorporaciones. En  la película, los protagonistas son StarLord, Drax, Rocket Raccoon, Groot y Gamora. Unos personajes completamente alejados de las grandes estrellas como los X-Men, Hulk, Los Vengadores, La Liga de la Justicia, Batman... y el que logren conectar tanto con el espectador, siendo completos desconocidos, es motivo suficiente para darle la enhorabuena a James Gunn.

Primeros Guardianes

El mundo del cómic es algo que me es desconocido, pese a que con pocas cosas he disfrutado tanto; de pequeña soñaba con tener toda la colección de los X-Men adornando mi estantería. Me tuve que 'conformar' con las viñetas del ilustre Ibáñez, con Tintín, Persépolis, Corto Maltés, Hellboy y el Capitán Trueno. Nunca tuve la oportunidad de comenzar mi tan ansiada colección de cómics, y ver al gordo de los Simpsons siempre me lo ha recordado como una puñalada trapera. Por eso me encanta ver este tipo de cine, cuya única pretensión es entretener.

Cierto, no son obras maestras del cine; cierto, gran parte del mérito lo tienen los dibujantes; cierto, todos sabemos cómo va a terminar la película antes de que empiece. Sin embargo, algo que siempre aprecio es que las productoras te vendan el producto tal y como es. Mirad, si no, 'La gran estafa americana', que se daba aires de grandiosa, cuando en realidad es más bien normalita. Marvel y cía. te venden sus películas como lo que son: entretenimiento, golpes, tíos duros, tías buenas, efectos especiales, chistes malos y a Stan Lee haciendo un cameo (el de Guardianes no me ha gustado tanto como otros, siendo sincera).

Star-Lord, el prota

Por eso, cuando yo fui al cine a ver Guardines de la Galaxia no esperaba más de lo que he exigido al resto de superhéroes: no dormirme. Y es por eso mismo que al llegar a mi casa le puse un 8 en IMDB y FA. ¿Por qué? ¡Pues porque me sorprendió gratamente! Me dieron más de lo que me habían vendido. Y yo sé apreciar eso, sin importar que esté siendo parcial.¿Por dónde empezar a explicar? La película en sí es bastante larga (era inevitable, no puedo quejarme por ello), con un final apresurado, pero he aquí los motivos por los que es de las mejores - si no la mejor - de Marvel (no hay spoilers):


1. Es divertida Y los personajes son divertidos. Vale, soy de risa bastante fácil, y eso explica las veces que estuve a carcajada limpia con la parejita de al lado mirándome raro. Quizás no todo le mundo coincida conmigo en esto, pero es increíble la 'química' entre los personajes, y cómo se va encauzando a lo largo de la película. Punto justo de chiste y dramón.

2. El maquillaje. Mira que es difícil poner bichos verdes, rosas y azules sin que parezca teletubbielandia, pero consiguieron un resultado más que aceptable.

Gamora, el punto sexy de la peli
3. La BS, sin dudarlo un segundo. Disfrutadla en Youtube o en Spotify. Titulada Awesome Mix Vol.1, cuenta con temazos muy bien integrados en la película. Quizás es lo que más me ha gustado del filme, básicamente por mi alma ochentera. No sé si podrán estar a la altura en la segunda película.

4. Los efectos especiales. La fotografía. omgomgomg. Holaaaa, qué pasa con todos esos colores epilépticos... Es absolutamente fantástico poder ver escenas de acción con tanta precisión e iluminación, estoy hasta las narices de batallas finales en el puñetero planeta más oscuro del jodido universo. Vale que tiene que ir acorde con el tono de la película, pero es que quiero ver algo si he embargado mi casa para poder pagar la entrada. GDLG ha quedado preciosa, casi que me recuerda al cine francés con tantos colores. Y, por supuesto, ayuda el hecho de que no hayan dado tanta importancia a las batallas espaciales o con pistolitas estelares. Sin tanta acción como The Avengers, llega a ser incluso más entretenida.

La parte tierna-a-la-vez-que-malota de la película
5. El momento maceta.

6. El momento pierna ortopédica.

7. Los actores, que no son nada espectacular a excepción de Cooper pero consiguen ser muy (repito, muy) creíbles, incluidos el palitroque y el mapache. Destacar a Drax, interpretado por Bautista (soy fan absoluta de la WWE y de 'La Bomba'). Esperaba algo ridículo por su parte, pero me ha sorprendido. Gunn ha sabido utilizar sus defectos como actor e incorporarlos a la película. El personaje ya te avisa de que no puedes esperar de él más que una masa de músculos con más mala leche que inteligencia. Por contra, el villano es más bien decepcionante y Benicio del Toro te deja con ganas de más.

El maquillaje de Drax era el peor: 4h para ponérselo

En definitiva, sé que no es un peliculón. Pero igualmente animo a cualquiera a ir a verla con la intención de pasar el rato. Guardianes de la Galaxia es, en resumen, divertida y entretenidísima. Y hace mención a Footloose, mal rayo les parta.






viernes, 4 de julio de 2014

Fantastic Mr. Fox




Soy una fan incondicional de los cuentos y las películas para niños. Muchas veces no hace falta gran profundidad psicológica o un reparto de diez, sólo unos cuantos muñecos y mucho cariño, para crear una película maravillosa.



El Sr. Fox es un zorro que ha dejado atrás su vida como ladrón de gallinas para cuidar de su esposa y su hijo. Sin embargo, no puede resistir la tentación de dar un gran golpe: saquear las granjas de Bunce, Boggis & Bean. Esto provocará que el vecindario entero se ponga en peligro, ya que los granjeros están determinados a acabar con el zorro. Una película (un libro, en realidad) que trata la lucha de uno mismo contra su propia naturaleza.



Parte del mérito lo tiene Roald Dahl, como ocurre con cualquier adaptación. Debo admitir que no conocía este libro, pues estaba más familiarizada con los que tengo en casa: "Las brujas", "Relatos de lo inesperado", "Matilda", "El gran gigante bonachón"... Todos son relatos fantásticos, hechos para niños pero aptos para adultos. En España creo que éste se titula "El superzorro" (lamentable traducción, pero supongo que al ser un cuento poco importa), aunque la película la han dejado prácticamente igual: "Fantástico Sr. Fox".

El Stop Motion es lo que hace de este largometraje algo tan especial. Creo que sin este tipo de animación, mi opinión hubiera sido completamente distinta. ¿He dicho que soy fan de las películas para niños? Bueno, soy aún más fan del Stop Motion. Lograr con esa técnica que una película tenga fluidez y realismo, que no nos cueste mirar la pantalla por los movimientos entrecortados, es un grandísimo logro. Es cierto que al principio aprietas los labios y frunces el ceño por lo extraño que te resulta no estar viendo una animación digital, pero a mí (y tal vez únicamente a mí) me parece que consigue hacer de la película algo más entrañable y divertido. Los primeros planos en esta cinta son canela en rama.

En cuanto a reparto, no se cortaron un pelo al contratar a Meryl Streep (muy, muy, muy, muy enamorada estoy de esta SEÑORA), George Clooney y Bill Murray, entre otros. Por recomendación la vi en VOSE, lo cual fue un acierto ya que Mr. Fox no hubiera sido lo mismo sin ese tono tan profundo de galán. Bill Murray hace de tejón gruñón, y es que hasta en el doblaje tiene que hacer papeles ridículos. Pero me encanta.


No sé qué me ha gustado más de la película, si la banda sonora, el pequeño de Ash, las secuencias rápidas en Stop Motion, los juegos de palabras, el acabado tan artesanal que tiene, los colores y la iluminación, o la mejor escena de la película:

MR. FOX: What are you doing here? Canis Lupus, Vulpes Vulpes!... I don't think he speaks English or Latin. 


En definitiva, una película para disfrutar sin dejar de lado la calidad. Repito por si no lo dejé claro: la banda sonora es maravillosa.


PD: cito a continuación, en relación a la escena del lobo (spoilers).

Director Wes Anderson said of the scene:
"There were some people who didn’t like the wolf scene. In particular one very important person. And he said, I don’t understand what this scene is doing in the movie. And I would always say to him, I’m not cutting it. That scene is why I’m making the movie."
An anonymous reviewer stated this more eloquently:
"I think it shows that Mr Fox is afraid of his wild side and yet desires greatly to live it due to fears that he has become domesticated. The wolf represents pure, unbridled, rugged and wild power. Mr Fox tries to communicate with it but realizes that being wild is not for him and is best left to the wolf. He exchanges a symbol of brotherhood with the wolf and returns to his family and community while the wolf returns to its harsh forest, not needing a thing in the world, being truly free."


jueves, 3 de julio de 2014

Lieksa!

¿Habéis visto alguna vez una película extraña en la que no sepáis decir con certeza qué es lo que hace que os guste? Lieksa! es para mí un ejemplo claro, una película RARA (en mayúsculas) pero preciosa.



Sinopsis
Martta tiene que hacerse cargo de su prole, un grupo nómada de lo más variopinto, cuando el patriarca enferma. Los problemas empiezan cuando la oveja negra de la familia regresa y se fija en su hija. Todo se dificulta por la... escasez de inteligencia de sus hijos y por la presencia de un desconocido que ha perdido la memoria. Las mujeres Koppelo tendrán que echar mano del ingenio para solucionar sus problemas.

 La familia Koppelo depende de las mujeres...

Es difícil evaluar una película en finés subtitulada (muy malamente) en inglés. Quizás fue por eso que me resultó tan extraña. Saltos temporales que el espectador tiene que rellenar con su imaginación, una acción muy precipitada que te obliga a ir enlazando un suceso con otro y unos personajes que deberían ser planos pero logran tener profundidad pese a no tener evolución ninguna.

Si me preguntaran por la nota que le daría a esta película, tendría un problema. El guión es prácticamente basura, pero los personajes son entrañables, y el paisaje y la banda sonora son preciosos. Y es que, en una palabra, describiría esta película como "bonita". No estoy familiarizada con el cine finés y tal vez sean habituales los filmes bucólicos que están a caballo entre la comedia y el drama, sin ser ninguno de los dos géneros.

Los paisajes, por contra, no tienen nada que comentar. Son sencillamente espectaculares. Le dan color y vida a la historia, junto a un vestuario muy bien seleccionado. Y qué decir de la banda sonora...con mi adorado Marco Hietala.

Por último, lo que más me ha llamado la atención ha sido la falta de un protagonista. Se supone que debería ser la interesantísima Martta, "La Matriarca", pero no es así. El personaje principal es la familia Koppelo al completo, y no alguno de sus miembros por separado.

Martta Koppelo


Me ha gustado bastante, aunque no sé si estaría preparada para otra película como ésta. Demasiado bizarra.